Kevin Ribeiro (@kevinho.vz) – Pasión X el Deporte. – José Mourinho y la Roma, su equipo, han llegado a un acuerdo con la Fiscalía de la Federación Italiana de Fútbol (FIGC) y pagarán cada uno una multa de 20.000 euros.
Esta sanción se debe a que el entrenador portugués acusó al árbitro Matteo Marcenaro de no tener la estabilidad emocional suficiente para un partido de nivel y a Marco di Bello de que siempre lleva mala suerte a la Roma.
“El árbitro me preocupa, lo hemos tenido tres veces como cuarto árbitro y la sensación es que no tiene la estabilidad emocional para un partido de este nivel. Su perfil no me deja tranquilo, ni siquiera el que estará en el VAR, es un árbitro con el que siempre hemos tenido mala suerte”, expresó Mou.
Cabe destacar que es la primera polémica de Mourinho con los árbitros en Italia, ya que ha criticado abiertamente a varios réferis por su nivel y decisiones.