Jesús Bello @Je_susGE. Luego del revés sufrido en Bahréin, la Scuderia buscará retomar fuelle buscando corregir los errores de un monoplaza que comparte sus cadencias con el F1 75 de la temporada pasada, que, en la primera cita del año, demuestra que los pilotos siguen luchando con la degradación y la fiabilidad.
Rescatando un cuarto lugar con el español Carlos Sainz que, se vio superado por la diferencia de ritmo con respecto a su compatriota Fernando Alonso con su Aston Martin, auto el cual, hasta ahora su fuerte, es la baja degradación de neumáticos. Cuando pintaba todo para un podio de los italianos, el ritmo del SF 23 cayó en picada, al punto de no solo ser superado por el asturiano, sino que este mismo fue capaz de sacar más de 10 segundos de ventaja con respecto a Sainz, y a final de carrera con Lewis Hamilton pudiéndose a acercar a menos de dos segundos del español.
Una caída de rendimiento importante que los de Maranello deben solucionar, porque el hecho de ser rápidos a una sola vuelta o lo que es lo mismo, en clasificación, no les dará las victorias que tanto anhelan y prometieron desde el último cambio de normativa.
Por otra parte, vuelven los problemas de fiabilidad, esta vez con Charles Leclerc como afectado, marchando en posición de podio y con un abandono debido a problemas con las baterías. El circuito de Jeddah se convertirá en la prueba de fuego para los de Ferrari, con un asfalto que degrada mucho menos que el del desierto de Bahréin, y siendo el trazado urbano más rápido del calendario, factor que beneficia a la siempre veloz maquina italiana, solo queda esperar a este fin de semana y observar cual será el desenlace de la historia